31 dic 2017

LA SAGRADA FAMILIA

El tiempo de Navidad nos ofrece todos los años la oportunidad de celebrar a la Sagrada Familia. Una fiesta hermosa que celebra también a toda familia humana, «sueño de Dios para su amada creación» (Papa Francisco).




En la celebración se nos invita a contemplar el pasaje del Evangelio en el que Jesús, María y José se dirigen a Jerusalén con ocasión de la fiesta de la Pascua. En este rico episodio encontramos muchos elementos que iluminan nuestra propia vida y realidad familiar. De modo sencillo y breve intentaremos reseñar algunos de ellos. 
En primer lugar, vemos que el Evangelio nos dice que José y María «iban todos los años a Jerusalén» y ese año lo hicieron llevando consigo a Jesús que ya tenía doce años. María y José son personas que valoran y siguen las costumbres y tradiciones de su pueblo. Observan la Ley, están enraizados en la historia y la vida del pueblo al que pertenecen y, sobre todo, son personas religiosas (en el sentido más rico y auténtico del término). Eso no los hace ser "chapados a la antigua". No se trata de eso. De lo que se trata es de aprender a valorar en todo lo que tienen de bueno las tradiciones del pueblo y la cultura a la que pertenecemos y en la que nuestra familia vive. La identidad, la historia, las costumbres, son riqueza que da solidez a la vida familiar y no un lastre que nos ata al pasado. En ese marco, la vivencia de las tradiciones religiosas cobran particular importancia, al igual como lo vivimos en estos días de Navidad.
En segundo lugar surge la pregunta: ¿cómo se les pudo perder Jesús a María y a José? Con la conciencia que tenían -quizá no plena, pero sí suficiente- de quién era Jesús, ¿cómo “dejaron” que se perdiera? Varios autores espirituales comentan que en este tipo de viajes era costumbre que los niños hicieran el camino en compañía de parientes cercanos a la familia. Por eso se explica que María y José podrían haber viajado un día entero sin darse cuenta de que Jesús no estaba con ellos. Con doce años, Jesús gozaba de plena libertad por parte de sus padres, que sabían era el hijo del Altísimo; le procuraron todos los cuidados posibles, pero no cedieron a la tentación de tenerlo totalmente sobre protegido. Como madre, consciente de haber traído al mundo al esperado de los tiempos, María podría haber optado por nunca despegarse de su hijo, por no quitarle un ojo de encima ni un segundo. ¿Cómo arriesgar tan gran tesoro a ellos confiado? Y, sin embargo, María arriesga; no para poner a Jesús en peligro, sino para ofrecerle el espacio requerido y crezca como persona. Y de José se puede decir algo parecido. ¡Qué responsabilidad la del padre adoptivo del Hijo de Dios! ¿No tenemos aquí una gran lección en relación a la educación de los hijos?
Finalmente, la Sagrada Familia nos enseña en las palabras de un niño de doce años la lección más importante de todas: Dios debe ser el centro de toda la vida familiar. Y lo será cuando sea también el centro de la vida personal del padre, de la madre y de los hijos. Quizá esa sea una de las tareas más difíciles en las que los padres tienen que educar a sus hijos. Aprovechemos la celebración de esta fiesta de la familia para hacer lo que nos enseña María: meditar y conservar la Palabra de Dios, de modo que el Niño Jesús vaya creciendo en estatura y gracia también en nuestro corazón y seamos, así, cada vez más semejantes a Él. Ello, sin duda, redundará en beneficio de nuestra vida familiar.
Lectio de Ignacio Blanco

30 dic 2017

CELEBRACIÓN DE SAN ESTEBAN EN NAVALCUERVO


Como viene siendo tradición, el pasado día 26 de diciembre, los fieles de Navalcuervo festejaron a su patrón San Esteban con la celebración de la Santa Misa, seguida de la procesión con el Santo por sus calles y una comida de convivencia en el salón de usos múltiples.

 



 

26 dic 2017

SAN ESTEBAN



Esteban era de origen judío. El vocablo esteb significa corona. Por ello su nombre significa coronado.  Dios honra su nombre coronando su vida con el martirio. 

Vivió a principios del siglo I y fue uno de los diáconos nombrados por los apóstoles. Crítico con la actitud de la iglesia judía y con el uso mercantilista que se daba al templo de Jerusalén, fue acusado de blasfemia por los fariseos, y condenado a morir lapidado. Durante el martirio, Esteban pidió el perdón para quienes le apedreaban.
Se le suele representar como un hombre joven, todavía sin barba, vestido de diácono, con una capa corta llamada dalmática, abierta por los dos lados y con mangas hasta el codo. 

Normalmente, lleva en una mano una piedra, en alusión a la manera en que fue martirizado y, en la otra, una hoja de palma, símbolo de victoria desde la Antigüedad, atributo de los santos mártires que representa su victoria sobre la muerte.

23 dic 2017

LA NAVIDAD ES...

Si tengo dudas, me decido;
la Navidad es confianza.


Si tengo mal humor, sonrío;
la Navidad es alegría.

Si tengo riquezas, comparto;
la Navidad es solidaridad.

Si tengo desánimo, lucho;
la Navidad es entusiasmo.

Si tengo pereza, me esfuerzo;
la Navidad es voluntad.

Si tengo intolerancia, acepto;
la navidad es humanidad.

Si tengo inmadurez, crezco,
la Navidad es conocimiento.

Si tengo ataduras, las rompo;
la Navidad es libertad.

Si tengo preocupación, me ocupo;
la Navidad es vivir el ahora.

Si tengo un ideal, voy a Él;
la Navidad es Dios.
©pam

19 dic 2017

¿QUIÉN HA VISTO AL NIÑO JESÚS EN NAVIDAD?

Regalos, juguetes, turrones, mazapanes, grandes almacenes y centros comerciales. Palabras que nos sugieren la Navidad. Cosas que muchas veces ahogan y oscurecen la auténtica celebración de estas fiestas. La gente se vuelve loca durante el mes de diciembre: asaltan tiendas, grandes almacenes, mercadillos. Compran todo lo que cae en sus manos. Se come hasta la saciedad para, luego, lamentarse por haberse pasado.


A los niños se les atiborra de regalos; ya no se espera a que lleguen los Reyes Magos. Importamos las tradiciones de otros países y traemos a Papá Noel, que llega antes con los regalos; muchos de éstos, inútiles, pero no importa: si están de moda y son de los más in se compran y punto.


Derrochamos en luces, adornos navideños, tanto en casa como en las ciudades y pueblos. ¿Qué hay detrás de todo esto? Un derroche de una sociedad formada en gran parte por personas que están perdiendo el gusto de divertirse y estar, sencillamente, con los demás. Y entre tanto derroche, regalos, luces, fiestas y buenos deseos,  ¿alguien ha visto dónde está Jesús?


Afortunadamente, aún queda gente que vive la Navidad con gran fe. Muestran la alegría que les supone la venida del Niño Dios. Y, a pesar de vivir inmersos en un mundo superficial y donde reina el consumo, encuentran un tiempo para recordar de verdad lo que significan estas fiestas tan entrañables para vivir en familia su fe en Jesús. 

18 dic 2017

LETRILLA DE LA VIRGEN MARÍA ESPERANDO LA NAVIDAD


Cuando venga, ay, yo no sé
con qué le envolveré yo,
con qué.

Ay, dímelo tú, la luna,
cuando en tus brazos de hechizo
tomas al roble macizo
y le acunas en tu cuna.
Dímelo, que no lo sé,
con que le tocaré  yo,
con qué.

Ay, dímelo tú, la brisa,
que con tus besos más leves
la hoja más alta remueves,
peinas la pluma más lisa.
Dímelo y no lo diré,
con qué le besaré yo,
con qué.      


Pues dímelo tú, arroyuelo,   
tú que con labios de plata                                   
le cantas una sonata
de azul música de cielo.
Cuéntame, susúrrame
con qué le cantaré yo,
con qué.

Y ahora que me acordaba,

Ángel del Señor, de ti,
dímelo, pues recibí
tu mensaje: «He aquí la esclava».
Sí, dímelo, por tu fe,
con qué le abrazaré yo,
con qué.

O dímelo tú, si no,
si es que lo sabes, José,
y yo te obedeceré,
que soy una niña yo,
con qué manos le tendré
que no se me rompa, no,
con qué.

17 dic 2017

CUARTO DOMINGO DE ADVIENTO

Como sabemos, el Adviento abarca los cuatro domingos anteriores al Nacimiento de Jesús. Este año es especial, puesto que el cuarto domingo coincide con Nochebuena, haciendo que el tiempo de Adviento sea más corto que otros años.

¿Y qué debemos hacer los católicos para cumplir con el precepto de oír misa todos los domingos y fiestas de guardar? ¿Si asistimos a la Misa de Nochebuena cumpliríamos tanto con la obligación de asistir a la Eucaristía dominical como a la de Navidad? No.

Sin embargo, para situaciones como las de nuestras Parroquias que conllevan oficiar varias misas en un mismo día por el mismo sacerdote, siendo que coincide la Nochebuena con el IV Domingo de Adviento, sería desmesurado el número de misas a oficiar; habría que incluir en menos de tres días las misas del IV Domingo de Adviento, las de Nochebuena y las de Navidad; un total de 12 misas. Por ello, el señor Obispo, don Demetrio Fernández, ha autorizado a nuestro párroco a suprimir las misas del IV Domingo de Adviento.

Para quienes no están en el caso de nuestras Parroquias, la respuesta a las anteriores preguntas es:

El Comité de Obispos de los Estados Unidos para el Culto Divino dijo que los fieles deben asistir a dos Misas para cumplir con sus obligaciones de Misa dominical y navideña.

Desde mediados del siglo XX, la Iglesia ha permitido a los católicos asistir a Misas anticipadas para los domingos y días de precepto como “una conveniencia para muchos de los fieles”.

“La mayoría de los canonistas difieren de la Constitución Apostólica del Venerable Papa Pío XII, Christus Dominus (6 de enero de 1953), que dio las 4:00 p.m. como el momento más temprano en que se pueden programar Misas anticipadas”, dijeron los obispos en su carta de 2017.

Esto significa que la Misa del Cuarto Domingo de Adviento se puede cumplir el mismo 24 o en cualquier momento después de las 16:00 h. del 23 de diciembre. El precepto de la Misa de Navidad se puede cumplir el lunes, o en cualquier momento después de las 16:00 h. del 24 de diciembre.

En el caso de dos días consecutivos de Misas obligatorias, como en Navidad de este año, la “opinión predominante de muchos canonistas es que cada fecha obligatoria se debe cumplir con una Misa separada”, añadieron.

Según los obispos, la cuestión de si tales obligaciones podrían cumplirse en una sola Misa fue planteada anteriormente por los obispos en lo que se llama un “dubium”, que fue “respondido negativamente por la Sagrada Congregación para el Clero y aprobado por el Papa Pablo VI en 1970”.

Aquí algunas opciones para asistir a la Misa de Navidad y la del Cuarto Domingo de Adviento:

Opción # 1: Misa el sábado por la noche + Misa el domingo por la noche

Opción # 2: Misa el sábado por la noche + Misa el lunes

Opción # 3: Misa el domingo + Misa el domingo por la noche

Opción # 4: Misa el domingo + Misa el lunes

Fuente: ACI Prensa

TERCER DOMINGO DE ADVIENTO

"Estad siempre alegres en el Señor, os lo repito,
estad alegres: el Señor está cerca." (Flp 4, 4.5)

Estamos ya en la tercera semana de Adviento, en el domingo de Gaudete; esta palabra es el imperativo de un verbo latino: gaudeo, que significa gozar íntimamente, complacerse en algo. Por tanto, “gaudete” significa regocijaos

Regocijo en Adviento porque pronto nacerá el Salvador: aumenta la alegría y el júbilo por la venida del Señor Jesús, que está cada vez más cerca de nosotros. Encendemos la tercera vela de nuestra corona de Adviento. El Señor nos ilumina cada vez más. 



Abramos nuestro corazón, que muchas veces está en tinieblas, a la luz admirable de su amor.

El color rosado de los ornamentos de este domingo de Gaudete es un respiro en el camino de la austeridad al divisar en el horizonte la gloria que se va a alcanzar.




10 dic 2017

HORARIOS PARA LAS FIESTAS DE NAVIDAD


SEGUNDO DOMINGO DE ADVIENTO

La venida de Cristo exige una continua conversión. El tiempo del Adviento, es una llamada a la conversión para preparar los caminos del Señor y acoger al Señor que viene. El Señor ya no quiere nacer en una cueva, el Señor quiere nacer, ahora, en cada uno de los corazones de los hombres.

El encendido de la segunda vela nos acerca a la fiesta del Nacimiento de nuestro Señor Jesucristo en Belén y en cada uno de nuestros corazones. 


8 dic 2017

EL PRIVILIGIO ESPAÑOL POR LA INMACULADA

En 1760, el papa Clemente XIII (el mismo que suprimió a los jesuitas) proclamó a la Inmaculada como “Patrona Universal de los Reinos de España e Indias”, mediante la bula Quantum Ornamenti.
Carlos III instauró en 1771 la Orden que lleva su nombre y la puso bajo la advocación de la Inmaculada Concepción, de la que el monarca era devoto en agradecimiento al nacimiento del primer hijo del príncipe de Asturias. El color de la vestimenta de la Orden es el azul y las insignias (medallas y placas) llevan un grabado de la Inmaculada. Entre los deberes de los caballeros estaban su compromiso de defender el Misterio de la Inmaculada y comulgar en el día de esta fiesta o en su víspera. Estas obligaciones espirituales se suprimieron en 1847, cuando se reservó para premiar servicios al Estado.
El esfuerzo español tuvo su recompensa y el papa Pío IX proclamó el dogma de la Inmaculada Concepción mediante la bula Ineffabilis Deus. En ella no se mencionaba a España, pero el pontífice dio muestras de agradecimiento en los años siguientes. Por ejemplo, el 8 de diciembre de 1857, en la inauguración de un monumento a la Inmaculada en la Plaza de España, donde se halla la embajada española desde hace siglos, al bendecir la imagen, Pío IX declaró:
“Fue España la nación que trabajó más que ninguna otra para que amaneciera el día de la proclamación del dogma de la Inmaculada Concepción de la Virgen María”.
En 1864, el mismo papa concedió el “privilegio español”. Aunque el tiempo litúrgico es el Adviento y a éste corresponde el color morado, que indica penitencia y el deseo por encontrar a Jesús, con la excepción del tercer domingo, en que se permiten ornamentos rosas, los sacerdotes en España y sus antiguas provincias de Ultramar podrán oficiar vestidos de azul (el color de la Virgen, tal como se aprecia en infinidad de cuadros), en la fiesta de la Inmaculada y en su octava (los ocho días posteriores). También podrán usar vestiduras azules en todos los sábados en que se permitan las misas votivas de la Santísima Virgen.
Desde entonces, los españoles han seguido dando muestras de su acendrado carácter mariano. En 1892, la Inmaculada se convirtió en patrona del Arma de Infantería española debido al milagro de Empel, ocurrido en Flandes en 1585.
En su primera visita a España, Juan Pablo II alabó el compromiso de los españoles con la Virgen María:
“El amor Mariano ha sido en vuestra historia fermento de catolicidad; y ha impulsado a las gentes de España a una devoción firme y a la defensa intrépida de la grandeza de María, sobre todo en su Inmaculada Concepción”.
Pedro Fernández Barbadillo

SOLEMNIDAD DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN DE LA VIRGEN MARÍA

"El relato de la Anunciación que nos propone el Evangelio de la Misa de la solemnidad de la Inmaculada Concepción, pone en el centro de nuestra mirada la figura de la Madre, que encarna como nadie la esperanza cristiana en este tiempo de Adviento.






Dios nos supera y nos sorprende en la grandeza de su Madre, concebida sin pecado. También ella se vio sorprendida por el anuncio del ángel en su casa de Nazaret. Pero su respuesta es luz y estímulo para la nuestra. Ella responde con un  incondicional a la voluntad del Altísimo, al deseo eterno de Dios de hacerse uno de nosotros para nuestra redención. Aquel  de la Inmaculada hace presente al Salvador del mundo. María acoge y engendra a Cristo para entregarlo al mundo, cumpliendo plenamente su vocación y misión.

Santa María, en el misterio de su Inmaculada Concepción, nos llama también a vencer el pecado, el mal y la muerte. Ella nos enseña a abandonarnos en las manos de Dios, y es entonces, y sólo entonces, cuando encontramos la auténtica libertad. Ésa es la ruta que nos marca la Virgen Inmaculada: estar totalmente en Dios, para situarse con cercanía solicita junto a toda la Humanidad."
Carlos Escribano Subías


 

6 dic 2017

GOZOS A LA INMACULADA CONCEPCIÓN

¡Salve, salve, cantaban, María
que más pura que Tú, sólo Dios!
Y en el cielo una voz repetía:
más que Tú, sólo Dios, sólo Dios.

Con torrentes de luz que te inundan,
los Arcángeles besan tus pies.
Las estrellas tu frente circundan
y hasta Dios complacido te ve.
Pues llamándote pura y sin mancha,
de rodillas los mundos están,
y tu espíritu arroba y ensancha tanta fe, 
tanto amor, tanto afán.






¡Salve, salve, cantaban, María
que más pura que Tú, sólo Dios!
Y en el cielo una voz repetía:
más que Tú, sólo Dios, sólo Dios.


¡Ay, bendito el Señor! que en la tierra 
pura y limpia te pudo formar,
como forma el diamante la sierra,
como cuaja las perlas el mar.
Y al mirarte entre el ser y la nada,
modelando tu cuerpo exclamó:
"desde el vientre será Inmaculada                            
si del suyo nacer debo Yo".